Es un método médico clínico terapéutico que existe hace más de 200 años. Consiste en administrar al paciente, de acuerdo a la semejanza los síntomas y a concentraciones muy pequeñas, una medicina elaborada a partir de sustancias de origen vegetal, animal o mineral, con la finalidad de restablecer la salud del paciente. Sus fundamentos fueron establecidos por el médico Samuel Hahnemann (1755-1843) en Alemania. Actualmente la Homeopatía tiene presencia en todo el mundo: Europa (Inglaterra, Francia, Alemania, Suiza, España, entre otros), India, América Latina (México, Argentina, entre otros). En México, la Homeopatía inició desde 1850 con el reconocimiento de los presidentes Benito Juárez y Porfirio Díaz.
El tratamiento homeopático tiene una visión integral del paciente. El médico homeópata realiza una consulta muy detallada, elabora una historia clínica y toma en cuenta sus síntomas emocionales y físicos, antecedentes, experiencias y estilo de vida, con la finalidad de prescribir un medicamento de manera individualizada. Se busca dar el medicamento más beneficioso para la condición particular de cada enfermo.
El médico homeópata interroga más detalladamente al enfermo. Por ejemplo, si tiene dolor de cabeza, le pregunta desde cuándo lo tiene, cómo es el dolor, qué sensaciones tiene, que le mejora o empeora el dolor, que molestias acompañan al dolor. Y así de cada síntoma del paciente.